LEÓN, ESPAÑA

  

Iglesia cristiana considerada como la más antigua conocida de la ciudad de León. Perteneció a un monasterio fundado por el rey Ramiro II de León, construido entre 931-951 junto a su palacio y destinado a su hija Elvira Ramírez que ingresó en él como monja abadesa.

 

Con la incursión de Almanzor en la zona en el 988, el complejo sufrió una importante devastación. Más tarde se iniciaron restauraciones en la iglesia que llegó a ser parroquia, y consiguió mantenerse hasta los primeros años del siglo XX en un estado de abandono, por lo que estuvo a punto de ser destruida en 1910. Se salvó gracias al estudio arquitectónico del arqueólogo Juan Crisóstomo Torbado y al estudio histórico de Manuel Gómez-Moreno; ambos demostraron la importancia de conservar un edificio de gran valor en la historia del reino de León, por ello fue declarada Bien de Interés Cultural en 1931. En 2006 tuvo lugar la última restauración y puesta en valor de esta iglesia tan antigua.

 

El edificio a simple vista resulta sencillo, pero tras la investigación y el estudio ya citados, el arquitecto descubrió la planta y los cimientos de la iglesia mozárabe primitiva, testimonio de una etapa de la historia leonesa. Tras estos descubrimientos y el estudio exhaustivo in situ del profesor Gómez Moreno, las autoridades tomaron la decisión de conservarlo. [1]

 

El edificio original era de arquitectura mozárabe, con planta de cruz griega, con acceso al ábside por arco de triunfo sobre columnas. Tuvo dos ábsides de planta de herradura, enfrentados, siendo cuadrangulares los brazos del crucero; el crucero se cubrió por una bóveda gallonada de tradición lombarda compuesta por doce gallones cuyas aristas arrancan de las diagonales, que se conserva, construida con piedra toba y sillarejo. Esta planta fue marcada en el suelo como recuerdo del primer templo.

 

Siguiendo las excavaciones se descubrió que en el siglo XIII se amplió la planta de la iglesia, transformando la cámara del lado sur de la cruz griega en una nave adosada por este costado y en el siglo XV se hizo una obra simétrica a la anterior en el costado norte. También, se descubrió que en el siglo XVI el nivel interior se hallaba a unos 80 cm por encima del primitivo, ya que en esa época se formó una cabecera con cubierta de bóveda de crucería y terceletes; para esto se demolieron los muros del antiguo ábside oriental y se prolongó el muro de la nave norte hacia el este, construyendo las capillas de la Caridad al oeste y Santo Cristo al este, se edificó una sacristía junto a la nueva cabecera y se construyó un atrio de acceso en el lado oeste, derribando el contra ábside mozárabe del que pueden verse algunas piedras del arranque. Además, se elevó la espadaña de ladrillo. Así, el resultado de esta obra es lo que observamos en la actualidad.

 

En el 2006 se llevó a cabo la restauración del edificio con la ayuda y patrocinio de la Junta de Castilla y León y la Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León y, también, se restauró el retablo del siglo XVI, importante obra de la escuela de Juan de Juni.