LEÓN, ESPAÑA

A ambos lados de la Calle Ancha se suceden los edificios de carácter tradicional, típicos de los primeros años del siglo XX.  Se caracterizan por el uso de ladrillo para los lienzos y de sillares para los vanos y pisos inferiores. Estos vanos son generalmente adintelados, o formando arcoaciones en la planta baja. Los balcones, con antepechos de hierro generalmente sencillos, en ocasiones sobre ménsulas, son un elemento característico[1].

 

El edificio nº 17 de esta calle constituye un espléndido ejemplo de esta arquitectura doméstica. Con una estructura interna tradicional, se reviste de un repertorio decorativo clasicista y muy llamativo, que busca la simetría y depuración de formas. Es ejemplo de la influencia ejercida por la escuela madrileña y la enseñanza de la École des Beaux- Arts[2]. Los pisos se jerarquizan, marcándose la zona inferior mediante la imitación de sillares. Los tondos dispuestos en frisos, junto con una decoración escultórica muy llamativa de inspiración grecolatina, se combinan con elementos vegetales tradicionales. Los bustos sobre conchas veneras, con coronas solares al modo de la divinidad griega Helios, así como las cabezas de Medusa, decoran los dinteles de las ventanas.

 

En el chaflán que se sitúa en el acceso a la Calle Regidores, la decoración es más monumental, centrándose en la escultura exenta situada en el piso intermedio. La monumentalidad en la fachada más visible será un recurso habitual para dotar de presencia a los edificios de esta vía.